En la industria automotriz argentina, existen dos segmentos “calientes”, uno, el que nos representa en el mundo, es el de las pick ups medianas, donde hasta hace unos años parecía ser un mano a mano entre Toyota con su Hilux y Ford con su Ranger, hasta que Volkswagen puso toda la carne al asador y entro pateando el tablero con su Amarok, la cual, rápidamente se convirtió en referente y líder del mercado, quizás relegando a un tercer lugar al producto de origen americano.
El otro segmento caliente, el mas popular, es el de los hatchbacks del segmento B, segmento que históricamente tenia un rey absoluto, y era, ni mas ni menos, que el Volkswagen Gol, producto diseñado para las necesidades de la región y que a base de calidad (sobre todo su tercera generación), equipamiento y precio, domino esta porción del mercado por muchísimo tiempo.
Y en la historia (y en game of thrones), cuando muere un rey, comienzan las batallas por la sucesión. Al desaparecer el Gol del mercado nacional, por haber quedado relegado en cuanto a tecnología, pero sobre todo en seguridad, el trono quedo vacante y fueron varios los que intentaron sentarse en él. El candidato mas obvio era el hermano mayor del gol, el polo, un modelo ampliamente conocido en el mundo, pero que por estos lares era un desconocido del segmento, ya que el nombre estaba mas asociado a sedanes del segmento c, y el polo es un gran contendiente al título, con una plataforma moderna, gran seguridad, y muy bien equipamiento, tenia grandes chances de convertirse en el nuevo soberano, pero, dos cosas lo relegaron, en primer lugar, la importación y en segundo el precio. Al ser un automóvil mucho mas moderno que el gol, sus costos de producción son mas elevados y eso se refleja directamente en el precio final.
Otro de los contendientes, el representante local, es el Peugeot 208, el cual, al ser fabricado en el país, compite en disponibilidad y precio, características que por si mismas lo vuelven un rival de peso en esta lucha por el trono, a lo que se suma, un diseño logrado, moderno y juvenil, el cual es fundamental en este segmento. ( y acá cabe recordar al Clio Mio, modelo que carecía de cualquier elemento de seguridad activa, pero a fuerza de calcos, tasas y llantas, se convirtió en un éxito de ventas para Renault). Pero no todo es color de rosas para el león, ya que su principal flaqueza es quizás, la confiabilidad, la cual no es la mas destacada del segmento, mas proviniendo de un grupo industrial, que lastimosamente, se ha caracterizado por no ser referentes en esta área como lo es stellantis.
La marca que Parece que todo lo hace bien, Toyota, tiene, quizás el candidato mas firme a quedarse con el segmento, el Yaris. De mecánica confiable y precio competitivo, parece ser la opción inteligente a comprar un auto en este segmento, pues además, no tienen nada que envidiar a sus rivales en cuanto a tecnología y seguridad, sin embargo, su principal virtud, es también su principal defecto y es que, al ser, aparentemente, un producto tan bueno, su red de concesionarios no da abasto, y existen listas de espera para poder hacerse con uno de estos modelos y esto, a los impacientes y necesitados, lo obliga a ir por otras opciones ( por lo general 208).
Y si bien existen varios modelos más, en el segmento, el Argo de Fiat, el C3 de Citroën, el Logan de Ranult, por citar algunos, creemos que el titulo se disputa entre los tres primeros mencionados.
Sin embargo, recientemente llego un nuevo candidato a la corona, lo hace desde Brasil, pero con apellido coreano y no es otro que el Hyunday HB20, automóvil que conquisto el mercado brasileño y tiene serias intenciones de hacer lo mismo en Argentina.
Cualquiera que haya veraneado en el gran País Carioca, habrá visto las calles inundadas de este modelo y quizás se haya preguntado, “esta lindo, se ve moderno, ¿Por qué esto no se vende en Argentina? La respuesta a esto es sorprendente, ya que no existió ni una restricción de mercado o importación, ni tampoco una baja expectativa de ventas, ni mucho menos, una legislación rebuscada que no permita su arribo a nuestro país. Simplemente, el auto es tan exitoso en Brasil que su volumen de fabricación no permitía exportarlos, por no existir la cantidad de unidades fabricadas suficientes.
El HB20, llega en 3 versiones, una de entrada con caja manual y dos más con transmisión automática. Cabe aclarar que esta transmisión automática, es una convencional y no una CVT, lo cual, si bien resigna un poco en confort, garantiza confiabilidad a largo plazo.
Todas las versiones contaran con un motor 1.6, aspirado (cadenero) de 1.6 c.c. y 123cv de Potencia, lo que lo vuelve de los más potentes del mercado.
Además, todas sus versiones contaran con 6 airbags, control de estabilidad, control de tracción, asistente de pendientes (lo que acá en Misiones es muy útil), cámara de retroceso entre otras varias características.
Los precios irán desde $21.450.000 en la versión de entrada (confort plus manual) 24.450.000 (confort plus automática) y 27.300.000 para la más equipada (platinum safety).
Estos precios lo vuelven extremadamente competitivo, ya que, por citar un ejemplo, la versión más equipada de este HB20, es aun más barata que la versión de entrada del Polo de Volkwagen, en este caso la versión track.
Solo el tiempo dirá quien será el nuevo soberano de este segmento, uno de los mas codiciados de las empresas, por el volumen de ventas que genera, pero como los que vimos Games of Thrones sabemos, el trono no es para cualquiera. Es fundamental una red de concesionarios amplia, disponibilidad de unidades, de repuestos y sobre todo, una buena atención en post venta.
¿Estará Hyunday Argentina a la altura de las circunstancias? Hyunday Brasil lo hizo, y tiene un arma más que decente para poder hacerlo. Ahora, todo dependerá de los clientes, si es que encuentran atractivo y convincente este nuevo retador del segmento B.