La Fórmula 1 está evaluando la posibilidad de reintroducir los motores V10 a partir de 2028, combinándolos con sistemas KERS y utilizando combustibles sostenibles. Esta iniciativa busca recuperar el característico sonido y la emoción de los motores atmosféricos, que fueron reemplazados por los V6 turbo híbridos en 2014.
«El futuro está por discutir y aún no hay un camino definido. La idea sería adelantar el debut del V10 a 2028 o 2029» Nikolas Tombazis
Desafíos técnicos y políticos
El equilibrio entre las partes eléctrica y térmica en las unidades de potencia de 2026 ha generado complicaciones técnicas significativas. Esto ha llevado a algunos fabricantes a considerar extender el uso de los motores actuales. Sin embargo, esta propuesta enfrenta obstáculos contractuales y financieros.
«los fabricantes han invertido cientos de millones de euros en los motores de 2026, y cambiar de rumbo sería un golpe para ellos» Nikolas Tombazis
Impacto en los equipos y fabricantes
Si se optara por mantener los motores actuales, las alianzas entre equipos y fabricantes podrían verse alteradas. Honda, por ejemplo, podría ampliar su acuerdo con Red Bull, dejando a Ford en una posición complicada. Además, Audi podría verse obligada a utilizar motores Ferrari, lo que complicaría aún más el panorama. Estas dinámicas subrayan las limitaciones de implementar cambios drásticos en el reglamento.
Ventajas económicas del V10
El motor V10 presenta una ventaja económica significativa. Mientras que una unidad de potencia actual cuesta alrededor de 1,5 millones de euros, un V10 podría costar solo 200.000 euros. Además, los costos de diseño y desarrollo serían mucho más bajos. Sin embargo, Audi ha expresado que apoyaría esta idea solo si se incluye un pequeño KERS, para mantener la coherencia con los vehículos de calle.
Una propuesta con riesgos y oportunidades
Aunque el regreso del V10 podría revitalizar la Fórmula 1, también plantea riesgos. Ben Sulayem ha utilizado esta propuesta como una herramienta política para fortalecer su imagen, pero los fabricantes podrían resistirse si los costos se disparan. Como mencionó un experto, «los motores V10 tendrían que ser muy ‘estirados’ para alcanzar los mil caballos, lo que podría aumentar los costos nuevamente». A pesar de las incertidumbres, esta idea sigue generando interés en el paddock.
Fuente: Motorsport.com