Un nuevo campeonato del Turismo Carretera ha finalizado, el primero de la Nueva Generación de modelos, donde el Ford Mustang, pareció destacarse del resto, no solo obteniendo el campeonato, sino que, además, obteniendo 5, de los 6 primeros lugares de la tabla anual.
El campeón, fue Julián Santero, el Mendocino, que Surgió de la escalera de la ACTC, siendo campeón del TC Mouras en 2015, y que se ha destacado en cuanta categoría corrió, finalmente logro alzarse con el titulo que todo piloto argentino sueña, la tan ansiada copa de Oro.
Sin embargo, hubo un hecho que ensucio esta definición, y es que, su principal contendiente, Mariano Werner, el cual largaría cuarto la final y prometía un espectáculo sublime de automovilismo viendo a estos dos titanes pugnando punto a punto, lamentablemente tuvo que largar desde los boxes en el último puesto por una falla mecánica.
Y hasta aquí, nada fuera de lo habitual, las carreras son de autos y los fierros se rompen, peeeero, el problema estuvo dado porque la falla se ocasiono por la obstrucción de la toma de ingreso de aire al motor, por un montón de papelitos que tiro gente del público, cuando los autos salían a pista.
y nuevamente, hasta aquí, tampoco nada fuera de lo habitual, el Guri Martínez, casi pierde un campeonato porque papelitos le taparon el ingreso de aire al radiador, lo que disparo la temperatura de su Falcon, pero que afortunadamente no llego a causar daños en el auto. Pero lo de Martínez fue azaroso, los papelitos habían sido tirado por la hinchada para festejar y accidentalmente se metieron en el Ford amarillo, pero en este caso en particular, la cosa no fue así.
Posteriormente a la aparición de la falla, las cámaras de la transmisión oficial mostraron la repetición de la salida del Mustang del Entrerriano y se vio claramente como al menos 3 sujetos, tiraban adrede, los papeles en el ingreso de aire.
Según redes sociales, ya habrían identificado a estas 3 personas, sin embargo, al no existir un comunicado oficial, y menos un derecho de defensa, preferimos, no mencionar los nombres que circulan.
Claramente, lo sucedido fue un sabotaje, para que Mariano no pueda coronarse campeón por cuarta vez, privándolo del medio mecánico necesario para pelear en pista por su cuarta corona, tirando a la basura el trabajo de un montón de personas encargadas de poner en pista el auto.
Esta situación nos permite varios análisis. En primer lugar, el porque de la gente estando tan cerca de los autos a la salida de la pista. Mas allá del Folklore del automovilismo y de la pasión de los entusiastas, esto es un deporte y un negocio y es verdaderamente injusto que un puñado de inadaptados que no comprenden el esfuerzo y la dedicacion, perjudiquen un año entero de trabajo.
Cabe señalar que esta situación se da en pocos autódromos del país, el Roberto Mouras, de La Plata es un de ellos, porque en el resto, el publico se encuentra por detrás de un alambrado que rodea al circuito y que evita que estas cosas sucedan, más allá de algún desubicado que pueda tirar algún elemento contundente, con bastante fuerza eso sí, este tipo de situaciones no podrían pasar en otros autódromos de la argentina.
Y, en definitiva, lo que se va a lograr con esto es que se prohíba en todos los autódromos, el ingreso del publico a la largada de las carreras, y esa tan linda imagen de las hinchadas con sus banderas y batucadas tan cerca de los autos, solo vivirá en nuestra memoria.
El segundo análisis que nos permitimos es preguntarnos a quien beneficio esta acción.
Los primeros sospechosos, son hinchas de la marca rival, es decir Chevrolet, los cuales con esta acción impidieron que Werner alcance a Agustín Canapino en cantidad de Títulos, ya que el Titan, piloto en actividad con más campeonatos, tiene 4 y Mariano tiene 3 y este último tuvo una chance clara de obtener un cuarto campeonado.
Si bien esta hipótesis tiene sentido, no convence del todo, puesto que el título, termino recayendo también en un Ford, y esta acción tampoco daba muchas chances a la marca del moño para pelear por este, luego del mal resultado de Santiago Mangoni en la serie de la mañana.
Hemos leído en redes sociales, a hinchas de Chevrolet, mencionando que esto fue lo mismo que la desafortunada maniobra que tuvo Werner en el 2016 en contra de Matías Rossi, que lo privara al misil de consagrarse campeón y le diera un nuevo campeonato a Guillermo Ortelli, sin embargo, entendemos que son dos situaciones muy diferentes, una fue una maniobra, de carrera, entre dos pilotos en pista y otra fue directamente un boicot, que lo dejo sin ninguna (o casi ninguna) chance de pelearla en carrera.
Por otro lado, se habla del entorno de Santero, quien era el mayor beneficiado con la falla en el auto de Mariano. Nos cuesta creer que, de haber sucedido algo así, haya venido de la cabeza de un excelente deportista como lo es Julián, sin embargo, al haber tantos intereses de por medio, nunca se sabe.
A propósito de esto, genero mucho ruido en redes sociales, el anuncio, quizás apresurado, del retiro de Laureano Campanera, propietario del LCA Racing, equipo donde corría Julián. Si bien ya se sabia que era muy probable que el equipo se retirara luego de esta temporada, el anuncio tan cercano a la carrera, genero revuelo y sospechas, mas aun, conociendo los buenos tratos que el Laucha posee con la 15, hinchada de Chevrolet, mas estas sospechas, al menos por ahora, no pasaron de comentarios en redes por parte de hinchas de Ford, con el sentimiento agridulce de ser campeones, pero no, con el piloto que ellos quisieran.
Se sabe que la categoría esta investigando e intentando dar con los causantes de este boicot, mas si se quiere hacer un trabajo serio, es pronto para identificar a los autores, en tan poco tiempo, sin embargo, nuestro mayor deseo como fanáticos del automovilismo es que se haga justicia.
Por último, manifestar nuestra preocupación por los sucesos ocurridos en recientes definiciones de campeonato, ya que además de lo relatado en estas líneas, también recordamos los disparos en el auto de Leonel Pernía durante la definición de la clase 3 del turismo nacional 2023. El automovilismo siempre fue un deporte familiar, donde los pilotos son felices de llevarlos a sus hijos a ver las carreras y donde familias enteras pasan días acampando en un autódromo para disfrutar de la pasión y la emoción de esta hermoso deporte y la verdad que no esta bueno que esto se ensucie por un grupo de desubicados que arruinándole el trabajo a mucha gente, se piensan que vale todo para ganar, o , que si no gana quien yo quiero, puedo hacer cualquier cosa para que tampoco la gane el que yo no quiero. El folklor del tc esta en compartir con los hinchas rivales, un espacio, un asado, un trago, una cargada, sabiendo que puede ganar cualquiera y que la próxima carrera o el próximo campeonato lo puede ganar el otro, que no se pierda eso, porque estaríamos perdiendo lo mas lindo que tiene el automovilismo.
